FARINGITIS – LARINGITIS

La Faringitis es una inflamación de la faringe, que produce dolor de garganta. Suele estar causada por un virus o bacteria contagiosa, pero también existen causas no contagiosas como el reflujo ácido, una alergia o una distensión de las cuerdas vocales.
La faringitis no es una afección, sino un síntoma de una afección. A menudo se diagnostica con un hisopado faríngeo y se trata con medicamentos y terapias para aliviar el dolor.

La Laringitis es la inflamación de la laringe(laringitis). Existen causas infecciosas y no infecciosas, y ambas pueden causar afonía. También son comunes el dolor de garganta, la fiebre, la ronquera, la dificultad para tragar y la tos seca persistente.
Algunas causas infecciosas de laringitis son contagiosas. La mayoría son virales. Dependiendo del tipo de infección, la afección puede resolverse por sí sola o requerir tratamiento.

Principales causas

La faringitis y la laringitis suelen estar causadas por un virus o bacteria, y ocasionalmente por un hongo. Estas son algunas de las causas más comunes:

•Virus. El 80% de los casos son causados por un virus. Las infecciones virales de este tipo suelen transmitirse por contacto físico cercano o por transmisión del virus al toser, estornudar o hablar.

•Bacterias. Muchas bacterias pueden causarlas. Algunas se transmiten a través de gotitas respiratorias y contacto cercano; otras se transmiten sexualmente o a través de alimentos, agua o tierra contaminados.

Hongos. Las infecciones fúngicas asociadas suelen ser oportunistas (es decir, ya existen en el organismo, pero proliferan repentinamente cuando el sistema inmunitario está debilitado). Por lo general, las personas con un sistema inmunitario sano no la padecen.

•Alergias. Las alergias son causadas por una respuesta inmune anormal a un desencadenante inofensivo conocido como alérgeno. La reacción inmunitaria exagerada puede causar inflamación y la liberación de sustancias químicas que causan picazón. Cuando la garganta está afectada, puede desarrollarse, acompañada de tos y dificultad para respirar.

•Reflujo ácido. El reflujo ácido se produce cuando los ácidos del estómago regresan al esófago. (Sonda de alimentación) porque una válvula llamada esfínter esofágico inferior no funciona correctamente. Cuando la afección es crónica (persistente), se denomina enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE).

•Tensión vocal. Gritar, toser y cantar a un volumen alto de forma prolongada puede generar tensión en la laringe. Esto puede causar inflamación de las cuerdas vocales, junto con pequeños desgarros en capilares y cartílagos. En casos graves, esto puede provocar cambios permanentes en la voz, ronquera, tos persistente y el desarrollo de nódulos en las cuerdas vocales (también conocidos como quistes de las cuerdas vocales).

•La exposición a sustancias tóxicas inhaladas en fábricas y otros entornos laborales puede provocar lesiones químicas en la faringe y otras partes del tracto respiratorio.

Síntomas

• Dolor de garganta.
• Garganta seca y aspera.
• Dolor al hablar.
• Ronquera.
• Fiebre.
• Dolor muscular.
• Congestión nasal..
• Congestión ganglionar.
• manchas en el paladar.

Diagnóstico

Si tiene dolor de garganta, se le realizará un examen físico (generalmente con un endoscopio iluminado llamado laringoscopio) y se le preguntará sobre sus síntomas e historial médico. Se buscará síntomas como amígdalas inflamadas, manchas rojas en el paladar y manchas blancas en la garganta para determinar la posible causa.

Tratamiento

El tratamiento depende en gran medida de la causa.

La inflamación de garganta causada por bacterias puede requerir antibióticos. La causada por hongos puede requerir medicamentos antimicóticos. Las causas virales suelen resolverse por sí solas.

Los dolores de garganta debidos a alergias pueden beneficiarse de antihistamínicos y descongestionantes, mientras que afecciones como ERGE y LPR pueden beneficiarse de antiácidos e inhibidores de la bomba de protones (IBP).

La mayor parte del enfoque del tratamiento se centra en los cuidados de apoyo, reduciendo el dolor y la inflamación hasta que la infección viral siga su curso.

Descanso vocal, hidratación abundante, inhalación de vapor, humidificadores, bebiendo té con miel.