TENDON DE AQUILES

Una lesión en el tendón de Aquiles puede causar dolor, ardor, enrojecimiento e hinchazón. Este es un tendón grueso que une los músculos de la pantorrilla con el hueso del talón. Es crucial para caminar, correr y saltar.

Cuando el tendón de Aquiles se estira más allá de sus límites, se inflama o se desgarra. La tensión o lesión del tendón de Aquiles puede causar molestias que van desde un ligero dolor y rigidez hasta un dolor intenso.

Las dos causas más comunes del dolor del tendón de Aquiles son la tendinitis aquílea y la tendinosis aquílea. Si bien estas afecciones parecen similares, describen dos problemas diferentes.

Tendinitis y Tendinosis

Con frecuencia, la tensión repetitiva sobre el tendón de Aquiles es la causa de la tendinitis aquílea. Algunos de los problemas relacionados con el ejercicio pueden provocarla.

Las causas de la tendinosis aquílea son menos claras. Las teorías incluyen el uso excesivo, la disminución del riego sanguíneo y la resistencia a la tensión con la edad, el desequilibrio o la debilidad muscular, la falta de flexibilidad, entre otras.

Dentro de las causas posibles tenemos:

•No realizar calentamiento: Puede ocurrir cuando no se calientan los músculos antes de hacer ejercicio o cuando se aumenta repentinamente la cantidad de ejercicio. Cuanto más tensos estén los músculos, mayor será la tensión sobre el tendón de Aquiles.

•Sobreentrenamiento: También puedes sufrir si intentas hacer demasiado ejercicio y poco descanso.

•Usar calzado inadecuado: Hacer ejercicio con zapatillas desgastadas o con zapatos que no están diseñados para la actividad puede provocar lesiones.

•Correr y saltar: Correr sobre superficies duras, como el cemento, y saltar con frecuencia, puede irritar el tendón.

•Espolones óseos: En ocasiones, se produce cuando se desarrolla un crecimiento óseo en el talón o el calcáneo, en la parte posterior del tobillo.

•Otros problemas de salud: Ciertas afecciones médicas como la psoriasis y la presión arterial alta también se han relacionado con un mayor riesgo de tendinitis de Aquiles.

Síntomas

•Dolor en el talón y a lo largo del tendón al caminar o correr.

•Tendón doloroso y rígido por la mañana.

•Sensibilidad y dolor al tocar o mover el tendón.

•Hinchazón y calor en la zona.

•Dificultad para mantenerse de puntas.

•Dificultad para encontrar zapatos cómodos que se ajusten bien.

Rotura del tendón de Aquiles

  • Una rotura del tendón de Aquiles ocurre cuando las fibras del tendón se desgarran y se separan, ya sea total o parcialmente. Es posible que necesite cirugía, o no, dependiendo de la gravedad de la lesión y otros factores de salud.
  • La rotura del tendón de Aquiles puede ocurrir cuando se ejerce una fuerza repentina sobre él, lo que suele ocurrir con giros bruscos del pie (p. ej., al jugar al baloncesto). Incluso un paso brusco o un simple tropiezo pueden a veces ser suficientes para estirar excesivamente y desgarrar el tendón.
  • La degeneración también puede provocar la rotura del tendón de Aquiles. Los cambios degenerativos deterioran y debilitan la estructura del tendón, y este tejido debilitado puede desgarrarse con facilidad.
  • Cuando se rompe el tendón de Aquiles, algunas personas oyen un chasquido o un chasquido junto con un dolor intenso en el talón. Muchas sienten como si les hubieran dado una patada en la parte posterior del talón y, al darse la vuelta, descubren que no hay nadie detrás.
  • Puede haber un espacio visible donde se desgarra el tendón. Por lo general, con una rotura de tendón, una persona no puede caminar ni soportar peso sobre su pie, aunque un pequeño subconjunto de personas aún puede hacerlo.

 

El dolor causado por la tendinitis de Aquiles y la tendinosis de Aquiles es similar, pero hay una diferencia clave entre las dos: la tendinitis de Aquiles causa inflamación en el tendón, mientras que la tendinosis de Aquiles no.

La ubicación exacta del dolor puede variar. Puede sentirse más cerca de la base del músculo de la pantorrilla, a lo largo del tendón o más abajo, cerca del calcáneo.

Diagnóstico

Para diagnosticar algún tipo de alteración en el tendón:

•Para diagnosticar el dolor del tendón de Aquiles, se requieren una historia clínica y un examen físico.

• El examen físico puede incluir la inspección y presión de la zona alrededor del tendón de Aquiles para detectar dolor, inflamación, calor y signos físicos de una lesión.

•Se podría solicitar una radiografía para examinar los huesos. Esto ayudará a identificar cualquier problema, como espolones óseos, daño degenerativo o fractura.

•Las lesiones en el tendón se pueden identificar mediante resonancia magnética (RM) o ecografía.

 

Tratamiento.

●La movilización de tejidos blandos asistida ayuda a estimular la respuesta inflamatoria del cuerpo, lo que impulsa la producción de nueva proteína de colágeno.

●El entrenamiento de fuerza..

●Masaje de fricción profunda de los músculos que se unen al tendón de Aquiles.

●Estiramientos para generar flexibilidad y buena movilidad articular.

Estrategias de cuidado.

●Disminuir la movilización para evitar mayor inflamación y dolor.

●Hielo para controlar la inflamación.

●El uso de vendas o tobilleras para la actividad y tener un mayor control de la zona.

●Evite renguear o caminar mal, en todo caso vaya mas lento para evitar vicios en la marcha.

Consejitos.

•Estirar ayudará a evitar el dolor y las lesiones del tendón de Aquiles.

•El entrenamiento puede ayudar a fortalecer el tendón de Aquiles, así como los músculos.

•Utilice siempre zapatos que proporcionen una amortiguación adecuada para el talón y un buen soporte para el arco.

•Evite correr sobre superficies duras.

•Evite hacer ejercicio cuando este con dolor o molestias.

•Ante cualquier duda consulte con un profesional.

Muy Importante:
Ante la menor duda, inquietud o síntoma, consulte siempre a su médico de cabecera o a un profesional de la salud. Antes de iniciar cualquier tipo de tratamiento, ejercicio o toma de medicación es indispensable que cuente con el asesoramiento profesional y los estudios correspondientes.
El contenido de las notas que difundimos es de temas genéricos y a modo de divulgación científica y prevención.